
No se puede decir que sea un jugón, ni siquiera que lo haya sido anteriormente. Pero he de reconocer que los pocos juegos (casi todos) que he jugado tenían un denominador común: Eran juegos de Blizzard. Warcraft, Diablo, Warcraft 2, Diablo 2… Reconozco que me gustaron esos juegos y que jugué a ellos con frecuencia (a veces demasiada frecuencia, jeje).
Sin embargo hay algo que no habría estado dispuesto a aceptar ni entonces ni ahora; aunque está claro que mucho menos ahora: que Blizzard hubiera espíado mi ordenador para recoger información sobre mí. Y eso es algo que Blizzard ya hizo anteriormente (en 2005, rootkit) con World of Warcraft, un juego multijugador online con más de 8 millones de suscriptores (12 euros mensuales) pero de lo que los jugadores tuvieron la ocasión de librarse. Ahora Blizzard vuelve a la carga con una nueva versión de este spyware (TheRegister) dispuesto a recoger información sobre tu equipo y sobre tí (aplicaciones, url visitadas, todo tipo de información privada). Con el pretexto de evitar la piratería (que por otra parte les da igual pues es en los servidores de Blizzard donde se revisa la clave que te dará acceso) recogen un buen montón de información personal que vale mucho dinero si se usa con propósitos comerciales. Y para coger esa información personales recurren a espiarte intensivamente.
Vale, estamos de acuerdo en que no es un problema nuevo y que es el mismo problema de cualquier otro software privativo (como Windows XP o Vista, que también espías): la licencia te impone unas condiciones y las aceptas, si aceptas la licencia luego no des la vara. Lo que sucede es que me sigue llamando la atención que millones de personas pasen por ese aro sin darle mayor importancia. Y el caso de WoW es muy llamativo porque lo dicen abiertamente y a la cara: te vamos a espiar. Esto es lo que nos aparece si intentamos registrarnos, nos lo dejan bien clarito en la licencia y los términos de uso.

También hablan sobre este nuevo spyware en TheInquirer.

Sí, lo sé… un Off-topic, pero tenía ganas de rebajar un poco el tono del blog, y pensé que esta tontería valía la pena. ¿Qué sucede cuando buscas Google en Google? Bueno… es una tontería previsible, pero aún a?i nos va a dar juego suficiente para un post.
Cuando hablamos de televisión, Gran Hermano (y los realities en general) simboliza la elevación a la categoría de espectáculo televisivo de algo tan antiguo como el cotilleo: fisgonear la vida privada de alguien, estudiar sus manías, conocer sus mezquindades. Descubrir hasta lo que todos querrían ocultar. Gran Hermano actualizó al S. XXI las fronteras de la tienda del barrio, y de repente podías conversar de todas las estupideces de una tercera persona, que todo el mundo conoce porque todo el mundo las ha visto en televisión.