
Es una de las grandes sorpresas que nos ha deparado en los últimos días el diario de actualización de Ubuntu, la popular distribución de Linux que el mes que viene tendrá nueva versión libre en el mercado. Y es que esta próxima versión de Ubuntu Linux, que estará disponible el mes próximo, integrará dentro de su interfaz Dash de uso básica resultados del catálogo de Amazon. Así, si tecleamos «Empathy» (o «Shotwell», como en muestra la imagen que acompaña este post) el sistema nos sugerirá el popular cliente de mensajería instantánea, documentos que contengan esa palabra y finalmente una lista de productos disponibles en Amazon y que incluyan esa palabra, cuan si hubiéramos realizado una búsqueda en la popular tienda online.
Lo que unos ven como una nueva función ha sido tildado de bug por muchos otros usuarios y hasta el mismísimo CEO de Canonical (empresa que desarrolla Ubuntu) se ha pronunciado en su blog sobre este tema.
¿Amazon busca a Ubuntu o más bien al revés? En realidad, el beneficio es mutuo
Podría sorprendernos una integración de este tipo, en tanto recuerda a la peor plaga de crapware con la que los diferentes fabricantes ensuciaban las versiones de Windows preinstalado e incluso preguntarnos si el beneficio para Canonical vale la pena, a todas luces que seguramente modifica la «experiencia Ubuntu» de la que han hablado tanto en el pasado y que para muchos usuarios esta modificación de experiencia será considerada significativa.
Más allá de lo económico (y Amazon seguro habrá cubierto esa necesidad), lo interesante es lo que Canonical y Amazon ofrecen a la otra parte.
En un entorno de sistemas operativos convergentes (y Windows 8 está a la vuelta de la esquina), en los que la tabletización de los ordenadores personales que advertíamos hace un tiempo queda plasmada en herramientas como el Gatekeeper de Mac OS X (gran comentario de Juan Luis Chulilla hace un tiempo), Amazon descubre que su competencia está en el poder. Canonical tiene una base de usuarios exigua, sólo una fracción de la ya pequeña porción de usuarios que usan Linux, pero Amazon no aspira a venir preinstalado ni en OS X ni en Windows 8 y (conocedor de que es muy complicado ganar por la mano a quien impone las reglas) Canonical le brinda la oportunidad de integrarse en un sistema operativo de escritorio que además no quiere perder de vista el móvil, algo que ahora mismo no va a brindarle nadie más.
Canonical, por su parte, lleva años luchando por impulsar su propio «Centro de Software de Ubuntu» (con éxito dudoso). Pero si hay algo que no encuentras en esta suerte de App Store para Ubuntu es contenido: ni libros, ni revistas, ni películas, ni series. Amazon complementaría esta experiencia de tienda frente a la completa iTunes Store y al poderío de Redmond (que a buen seguro hará mashup de todo lo que tiene y más pronto que tarde comenzará a mirar hacia la fuerte integración de W8, su tienda integrada, Xbox, su servicio online, etc.) Está claro que lo que venda Amazon lo venderá Amazon, pero la experiencia fácil de encontrar cosas que ofrece uno y otro puede resultar beneficiosa para ambos.
Privacidad, ¿el verdadero coste de esta integración?
Para que cada vez que intento buscar algo en mi sistema Amazon me haga sugerencias, primero tengo que estar enviando la petición a sus servidores. Hace falta repetirlo para que la frase tome el volumen que necesitamos: cada vez que intentemos lanzar un programa, abrir un documento o realizar una búsqueda en nuestro sistema, los servidores de Amazon harán sugerencias contextuales.
Esto supone entregar una información extremadamente sensible a una empresa que ya cuenta con algunos de los sistemas de perfilado comercial más sofisticados del mundo.
Ante las críticas, la respuesta de Shuttleworth pretende ofrecer tranquilidad, pero no sé si logra su cometido. En su post afirma que los datos no van a parar a Amazon, sino que Canonical es quien recibe esa petición y «anonimiza» a los usuarios trasladando ellos la misma a Amazon. Un sistema abonado para que no una sino dos corporaciones tengan un registro de todo lo que buscas en tu ordenador. Si pretendía apaciguar los ánimos, creo que su tras su aporte de información logra lo contrario.
Conclusiones
Aunque seguramente sobredimensionado por las críticas, este movimiento podría ser tan efímero como vaticina Ryan Paul (Ars) o quizá marcar una nueva etapa de integración de Ubuntu con elementos online. Faltaría conocer aspectos que seguro Amazon y Canonical ya han decidido: ¿se adaptará la experiencia vía «geo ip» para aquellos usuarios que estén en una zona donde Amazon tiene tienda local o el sistema buscará siempre en Amazon.com?
Yendo más al core del asunto, esta integración no solventa los principales retos pendientes de este sistema operativo (y en los que creo que la distancia con otros sistemas no se ha recortado en absoluto), pero es posible que Canonical resuelva la integración sin afectar (demasiado) a la experiencia de uso de los más sensibles (posibilitando buscar activando y desactivando a voluntad esta petición a Amazon o desinstalando completamente este sistema, si el usuario así lo desea).
En todo caso, el riesgo es el de abrir la puerta a una nueva generación de shareware que vendría instalado con un sistema operativo como es Ubuntu, heredera de la tradición del software libre y en la que este mecanismo de bundling de software que el usuario no ha pedido nunca ha sido muy común, al menos hasta ahora.
La respuesta, mucho me temo, sólo será parcial el mes próximo con esta nueva versión de sistema operativo. Para poder saber qué rumbo toma este asunto realmente necesitaremos esperar a la próxima iteración de Linux, prevista para abril de 2013, y así comprobar si continúan con la ruta que han anunciado estos días o tras recibir el feedback de los usuarios cambian de estrategia.