RFID en el IEEE Spectrum

Chip RFID El número de marzo de IEEE Spectrum incluía varios artículos sobre RFID (gracias Carlos) que no he podido comentar hasta ahora. Uno de ellos es de Amal Graafstra, famoso por los implantes subcutáneos de RFID que se hizo. Se titula Hands on y relata un poco su idea de todo. Porqué se puso el chip y porqué lo hizo el mismo.

Amal cuenta en este artículo [nota: disculpen si lleno esto de signos de escepticismo] que entre las desventajas de verichip se encontraba que «la compañía requiere a los médicos que registren cada implante en una base de datos especial. Sus etiquetas tienen un recubrimiento especial que permite el crecimiento de la carne a su alrededor, aprisionando la etiqueta [nota: está demostrado que puede llegar a migrar, pero fijarla sería fundamental para evitar problemas mayores de salud] pero haciendo de su eliminación una tarea difícil y dolorosa». Luego señala otros inconvenientes como que VeriChip te obliga a implantártelo en el brazo (más arriba del codo), de modo que para abrir una puerta tienes que levantar el brazo, algo que le pareció más molesto aún que sacar la llave (una razón de peso, sin duda). La solución que encontró a su gran dilema vital fue utilizar un chip RFID como los de las mascotas (¿te sientes animal o persona?). Cuenta también las innumerables ventajas que le ve al asunto y que el uso de este chip no ha puesto en peligro su vida, aunque también admite que no podría evitar un ataque dirigido a su persona (si eso no es una desventaja suficiente…).

Hay un segundo artículo de la IEEE Spectrum, que firma Kenneth Foster (catedrático de bioingeniería de la Univ. de Pensylavnia), analiza en profundidad el debate ético y de seguridad inherente a la tecnología RFID. Antes de comenzar nos pone en situación [el enlace y la ciudadanía española son cosa mía, el origínal decía US Citizen]

Se necesita: Ingeniero de sistemas con experiencia en diseño de controladores de motores de alta potencia (5-100 kW). Imprescindible ser ciudadano español y poseer un implante RFID de control de acceso válido y compatible con la norma ISO1443.

¿Suena futurista? Hoy, sí; dentro de diez años quizá no.

Comentan (evidentemente) a VeriChip, pero también los extravagantes experimentos en bares de ciudades como BCN, en los cuales tener un chip-RFID-tarjeta-de-credito implantado se convertía en un elemento cool, de moda. En general no comentan nada que los asiduos de este blog (u otros de temática parecida) no supiéramos ya, pero es interesante las preguntas que se hacen: «Silverman (CEO de VeriChip) propone implantar el chip a los inmigrantes pobres en busca de una vida mejor, pero ¿no será ese implante extensivo a ingenieros, médicos, …?». La respuesta, que en el artículo no la dan, ya la conocemos en este blog, son consecuencias de la justicia preventiva. Sin dejar de mencionar que me parece profundamente clasista, marginador y xenófobo implantar a inmigrantes pobres colombianos. Pero no olvidemos que esa es tan solo la excusa.

Otra pregunta importante que lanzan tiene que ver acerca de la propiedad de los chips RFID. Cuando nos contratan nos dan habitualmente una tarjeta RFID para acceder al edificio de nuestra empresa, al parking del mismo, a nuestro departamento… (suerte que tengo mi cartera). Usamos la tarjeta pero ésta pertenece, contractualmente, a la empresa (cuando nos despiden hay que devolverla). ¿Quién posee el chip implantado? ¿El trabajador o la empresa? Cuando hace 15 años jugaba a Ciberpunk y te hacías implantes biónicos a cambio de convertirte en una propiedad latente de una corporación (podías ser reclamado en cualquier momento al servicio de la misma, bajo precio de pagar con la vida si te oponías) nunca pensé en la posibilidad de que esa situación llegase a dejar el universo futurista. Desde luego que esto parece menos extremista, pero ¿quién te lo asegura?

La pregunta sobre la propiedad del chip lleva a otra pregunta interesante: ¿Quién es el dueño de los datos contenidos en el chip? En el caso de VeriChip por motivos médicos, ¿quién es el dueño de mi historial médico? ¿y de mi libro de familia? ¿y de mi información biométrica? ¿Puede la etiqueta ser leída sin consentimiento de la persona que la lleva implantada? Bueno, para esta última tengo respuesta: el chip RFID se puede leer, y punto. Está hecho para ser leído en cualquier circunstancia, a menos que te metan en una bolsa de aluminio (y créeme, nadie quiere ir en una de esas bolsas de forense) se podrá leer. Si no te gusta este planteamiento no te lo pongas, si algo hemos aprendido de la informática es que los dispositivos son siempre menos seguros de lo que dicen sus fabricantes.

Como colofón sacan una conclusión: los chips RFID no son válidos para la identificación de las personas, son demasiado inseguros y hay que plantear una alternativa completamente distinta (proponen biometría, pero tampoco estoy tan a favor de la fiabilidad de la biometría, ademas de que luego nos arrancarán el dedo para robarnos el coche). Un artículo largo que se ramifica a base de enlaces que profundizan en distintos aspectos y que por eso mismo he tardado tiempo en leer.

*** Relacionado:

A vueltas con las monedas canadienses…

¿Recuerdan el caso de aquellas monedas canadienses con RFID? En enero un informe de Defensa de los EEUU confirmaba su existencia. Ahora, en mayo, nuevas e irrefutables pruebas corren a desmentirlo: Confundieron un chip RFID con un tinte rojo. Partamos de la base de que parece improbable que funcionarios de defensa, bien educados en estos asuntos, confundan un chip con una imprimación fosforescente. Pero consideremos la posibilidad de que digan la verdad, ¿por qué entonces tanto revuelo con los chips RFID en la dichosa moneda? Así de primer golpe parece difícil confundirlos, pero bueno, hay mucho patán y no quiero acusar de mentiroso a nadie. Pero parece raro raro raro… Y si suponemos que dicen la verdad, ¿por qué directamente pensaron que los estaban espiando con RFID en las monedas? No hay más info por ahora, pero esto más que la verdad parece el deseo estadounidense de echar tierra sobre este asunto en un tema que podría calar en la opinión pública. En cualquier caso procuraré estar alerta de buenas nuevas en este asunto y contarles lo que se vaya sabiendo.

Me llama la atención, por cierto, que en su día ningún medio se hiciera eco de la noticia pero ahora mismo el desmentido está en portada de 20minutos.es, ¿por qué no sucede al revés? Bueno, no me contesten la pregunta, ya tengo mi respuesta.

COMO instalar Beryl en Ubuntu Feisty (con nVidia y drivers privativos)

Parece que está de moda tener el escritorio muy bonito y muy perfectamente decorado. Creo que además la culpa hay que echársela a la inexistente (al menos en la visión para usuarios pobres) interfaz Aero de Windows Vista. Pues bien, aquí estamos nosotros con un COMO de los que estamos acostumbrados a hacer: COMOs sencillitos de baja tecnología ;)

Como en Linux tenemos un sistema no menos bonito de gestión de ventanas (Compiz-Beryl) y en Ubuntu no es especialmente complicado de instalar, vamos a ver cómo lo hacemos. Hemos dicho que no es muy complicado, pero si no lo hacemos bien podemos estropear alguna cosa. Este COMO sirve para instalar Beryl con tarjetas nVidia que requieren drivers privativos para usar las capacidades 3D (que son medio nuevas o nuevas). Los usuarios con tarjetas ATI creo que no tienen ningún problemas porque los drivers gráficos que Ubuntu trae de serie ya funcionan a la perfección (según tengo entendido).

Es posible que nuestra tarjeta gráfica requiera drivers privativos para funcionar correctamente, si no los necesitamos podemos ir directamente al punto 3. Y no te olvides de revisar que tienes activado el repositorio  «multiverse», imprescindible para instalar software privativo.

1. Instalar los módulos del kernel restringidos. Estos son módulos que no se incluyen de serie debido a cuestiones de licencias. Para tu versión de kernel (que usualmente será algo como linux-image-2.16.XX.XX-ubuntu) habrá un paquete con nombre parecido y el término «restricted». Búscalo con synaptic y lo instalas. ¿Fácil?

2. Ahora que tenemos instalados los módulos «feos» para el kernel,  instalamos los drivers privativos. Para ello vamos a «Sistema>Administración>Gestión de controladores restringidos». Nos dirá que nuestros drivers privativos no están habilitados. Marcamos esa casilla, descargamos los drivers y los instalamos (asegúrate de tener activado el repositorio «multiverse» de software privativo).

3. Instalamos Beryl. Seguimos los pasos que encontramos en el wiki de Beryl.

1. Abrimos un terminal y ejecutamos:

sudo echo «Beryl & nVidia installation script for ubuntu Ubuntu Feisty»

(usamos sudo para que no nos la pida luego, ya que usamos un texto multilínea que no debe ser interrumpido).

2. Copiamos y pegamos este texto completo en el terminal, de una vez [Selecciona el texto, ve al términal y haces click en el botón central -la rueda-].

echo «¡Instalacion completa!»
echo -e «Cierra la sesión y reinicia las X pulsando \e[0;31mCTRL+ALT+BACKSPACE\e[0m «
cp /usr/share/applications/beryl-manager.desktop ~/Desktop/beryl-manager.desktop
sudo cp /usr/share/applications/beryl-manager.desktop /etc/xdg/autostart/beryl-manager.desktop
sudo nvidia-xconfig –add-argb-glx-visuals
sudo apt-get -y install beryl beryl-manager emerald-themes
sudo apt-get update
-O- | sudo apt-key add –http://ubuntu.beryl-project.org/root@lupine.me.uk.gpgwget
feisty main» | sudo tee -a /etc/apt/sources.list http://ubuntu.beryl-project.orgdeb-src
feisty mainhttp://ubuntu.beryl-project.orgecho «deb
sudo cp /etc/apt/sources.list /etc/apt/sources.list.backup.beryl-script
sudo cp /etc/X11/xorg.conf /etc/X11/xorg.conf.backup.beryl-script

3. Cerramos la sesión y reiniciamos las X usando [CTRL+ALT+BACKSPACE].

Este sistema sirve para instalar beryl en muy poco tiempo, pero si no hemos preparado adecuadamente nuestra instalación (módulos de kernel, drivers) no funcionará y no sólo eso, sino que nos estropeará la configuración de las X (nada que no solucione un pequeño backup del archivo «xorg.conf», pero mejor no tener contratiempos, ¿no?).

¡Que aproveche!

Manual de uso del Copyleft

Manual Copyleft
Hace unas semanas estuve leyendo «Manual de uso del copyleft» y no había comentado nada por aquí. La verdad es que es un libro muy interesante que más que leerse se devora. Si tengo tiempo iré poniendo por aquí algunos pasajes interesantes del mismo.

De momento os dejo dos citas, una primera referente a la excesiva extensión de los privilegios del autor, a la obstaculización de la cultura que provoca y a la larga cola de internet.

Un tercer aspecto tiene que ver con las obras ya publicadas y se deduce del alargamiento de la extensión de los derechos de autor. Según la LPI, art. 26: «Los derechos de explotación de la obra durarán toda la vida del autor y setenta años después de su muerte o declaración de fallecimiento». Es decir, la mayor parte de las obras publicadas durante el siglo XX están todavía sujetas a derechos de autor. Sin embargo, muchas de ellas, por no decir la mayor parte, permanecen en una suerte de limbo de los justos antes de su definitiva incorporación al dominio público. Esta situación da lugar a muchísimos problemas, especialmente para las obras que no tienen una importancia comercial mayor, y que en muchos casos se pierden por desinterés de los titulares de los derechos (herederos, editoriales, instituciones), o simplemente porque se desconoce incluso quienes son esos mismos titulares. Más allá de los abusos a los que da lugar la legislación (setenta años después de la muerte del autor parece excesivo a todas luces), existe aquí una indudable pérdida cultural e intelectual de obras ilocalizables o no publicables debido a los problemas derivados de la titularidad de los derechos. En este sentido, la generalización del copyleft permitiría conciliar la remuneración de los titulares de los derechos y la disponibilidad de las obras, aunque sea con fines comerciales.

Si la esta primera reflexión está enfocada más a creación literaria o musical, la segunda entra directamente al mito del autor-genio, más a creaciones artísticas generales o a temas de patentes (o ¿acaso se puede patentar el doble click ignorando todo su contexto tecnológico, del que hace uso gracias a que no tiene patentes?).

Nuestra legislación sigue basada en una idea de la creación individualizada en la figura del genio que hace indisociable la obra de su creador. Sin embargo, toda innovación se produce de forma colectiva y por vías a veces muy complejas que normalmente incluyen comunidades y formas de vida de distinto tipo (culturales, científicas) y circuitos de formación que tienen a menudo fuertes dosis de financiación pública (universidades, centros de arte, de investigación).

Es cierto que todo avance social, toda revolución (desde la primitiva metalurgia del acero hasta la microelectrónica) tiene lugar de forma colectiva. Infinitas contribuciones infinitesimales que producen un todo, un bagaje intelectual y artístico común.

Otro día pondré algo del capítulo final, de Eben Moglen, que sirve de síntesis y conclusión al objetivo del libro que, por cierto, se puede comprar en Traficantes de Sueños. Si no lo quieres en papel te lo puedes descargar desde www.manualcopyleft.net.

¿Chips RFID para enfermos de alzheimer? No, gracias

Una de RFID, últimamente doy algo menos de caña, tan sólo porque he andado a tope de trabajo (¿alguna vez no lo estoy?) y leo menos noticias últimamente.

Este aviso lo recibí directamente en el newsletter de Spychips, pero cuando tardas unos días en comentar las cosas sabes que otras personas (¿Quién vigila al vigilante?) ya habrán hablado de ello ;) En cualquier caso no quería dejar de recordar este asunto importante relacionado con la RFID: El uso de implantes de chips RFID para monitorizar a enfermos de alzheimer levanta polémicas en Estados Unidos. ¿El motivo esgrimido para justificar estos implantes? Supongo que los lectores habituales ya lo adivinarán, pero para los nuevos/ocasionales: La seguridad (no, esta vez tampoco hay sorpresa) de los enfermos. Al fin y al cabo tienen alzheimer.

Parece buena idea, pero ojo, sólo lo parece. Destapemos la falacia: Te dicen «implante de chip para mayor seguridad», pero es falso.

La situación: los 200 ancianos (cobayas de laboratorio humanoides, perdón) están alojados en una residencia de ancianos. Evidentemente, pagan sus cuotas y supongo que estas cuotas son todos menos insignificantes. Una residencia vale una pasta en España, en EEUU no quiero ni pensarlo. ¿Dónde está la falacia? La falacia es que el uso de estos chips tan sólo persiguen reducir la necesidad de atención humana de los enfermos para así reducir costes, que de este modo pagan un montón de dinero para ser atendidos con humanidad aunque, paradójicamente, el mismo que les cobra por ofrecer trato humano quiere dejar de ofrecerles el trato humano para darles un trato automático (como las máquinas de café de tu trabajo o la caja automática del parking). Eso sí, sin bajarles el coste (para eso te intentan convencer de que la seguridad es incluso mayor ahora que antes).

Si en algún momento habéis pensado que el uso de este sistema electrónico llevaría precios asequibles para los ancianos, sin tener ningún contacto en el sector me juego mi mano buena a que no. Es precisamente para no bajar los precios que hacen esta campaña publicitaria del tipo «con el chip la atención mejorará mucho». Si no te venden la moto, una barbaridad como esa no se la cree nadie.

En fin, que en Florida (lugar donde están estos ancianos que van a ser marcados como perros) han convocado una jornada de rezo para ayudarles. Discrepo totalmente del tipo de protesta, pero comparto totalmente el motivo de la protesta. Toda la info en http://www.antichips.com/

Bocados de Actualidad (30º)

Pequeña ronda de enlaces interesantes que no pude comentar, trigésimos Bocados de Actualidad.

  • Carlos y un nuevo recordatorio a blogueros: para cambiar las cosas hay que salir del blog porque casi nadie lee blogs.
  • Acalpixca comenta Idemix, el sistema de autentificación digital de IBM. Worth reading, que dirían los ingleses ;)
  • Alkar anda a vueltas con la firma electrónica en Mercadona. Tyrannosaurus Reflex también lo comentó hace ya tiempo.
  • La pastilla roja traduce un artículo de Scott Berkun, «¿por qué dejé microsoft?»
  • Después lo ví por muchos sitios, pero el primer sitio donde lo leí fue el blog de Sergio Hernando: ha salido la versión 2 final de Gaim Pidgin ;)
  • En Noticias-TIC nos enseñaron un truco (para Ubuntu, claro) con el que asignar atajos de teclado a nuestros programas (o scripts) preferidos
  • Pedro J. Canut nos recuerda que el movimiento se demuestra andando, en ColorIURIS han creado un repositorio español de obras libres.

Quizá son menos que otras veces, pero son interesantes, bastante. La informática se revuelve bajo mis pies, tengo problemas domésticos con mi computadora así que no les extrañe mi bajo ritmo de actualización ni un largo silencio. Prometo que no miento cuando digo que sigo vivo. Por cierto, primera anotación enviada desde mi flamante Fedora Core 6. Voy a salvar (a tiempo parcial) una deuda histórica que tengo con esta distribución. Ya lo explicaré más adelante cuando saque conclusiones :)

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