Hace unos días pudimos leer una nota que no tuve tiempo (ni ganas, sí: a veces no hay ganas de bloguear) de comentar entonces. La UE acuerda tipificar como delito usar la red para fines terroristas, la noticia (con titulares ligeramente diferentes) apareció en muchos blogs y supongo que en muchos diarios digitales. Buscando hoy he encontrado la misma en La Vanguardia.
Tipificar la apología del terrorismo como delito. Un juicio infantil dictaría que la UE quiere este año ganar el concurso de obviedades. Pero no seremos tan simples. ¿Qué significa esto? ¿un simple brindis al sol o algo más? Opino que no es un simple brindis al sol, pero que las intenciones podrían no ser esas que llanamente inundan los titulares de encefalograma plano que inundaron los diarios.
Una pregunta tan sólo: ¿es que antes de ayer, el día antes de la tipificación de este delito que ya existía, alabar el terrorismo en internet no era delito? Qué estupidez, claro que lo era. ¿Qué podemos esperar entonces de esta declaración? Podemos adivinar que viene una subida de la presión sobre la libertad en la red. Evidentemente, todo esfuerzo es pequeño para hacer cumplir este nuevo delito, ¿no creen? Claro que lo creen. Parafraseando a David Bravo, es difícil decir que uno no está en contra de la apología del terrorismo en la red sin que suene a demencia senil. Es la semántica de combate, la neolengua destinada a enfocar la discusión de tal forma que no exista un contrapunto posible, o que los mismos sean vistos como algo completamente absurdo.
Y sin embargo, al tipificar como delito lo que ya estaba contemplado como delito (¡por todos los dioses, hacer apología del terrorismo es delito se haga en periódicos, en la red o mediante señales de humo! siempre lo ha sido) lo único que podemos temer es que esta nueva declaración se use para justificar medidas impopulares, como nuevas subidas de tensión en el control de la red.
La retención de datos aprobada por la UE hace un par de años y puesta en el alero por un tribunal alemán que consideró que no respetaba la privacidad (Liberty & Security), será la primera en recuperar la verticalidad tras los golpes sufridos. ¿Qué se juegan a que será así?

Hoy todo el mundo habla de lo bueno que es leer, incluso aquellos que fomentan una incultura rampante como medio para mantener a la población atontada y fácil de manipular. Incluso aquellos que se dicen dedicados a la difusión y la defensa de la cultura, como nuestro innombrable ministro, al que no le tiembla la mano para favorecer a la industria de la
Aquellos que ponen la mano en el fuego por el escrupuloso respeto de 