Las islas en la red

Tras leer Días verdes en Brunei, que me gustó muchísimo, ya tenía ganas de leer una novela completa de Sterling.

Lo cierto es que en Islas en la red Sterling desarrolla mucho más el universo que nos presentó en Días verdes en Brunei, para colmarlo de detalles. Este universo no es tan ciberpunk (en el sentido más literal: no es tan ciber, no tan futurista) como lo es el mostrado por Gibson, pero está más en contacto con la realidad actual y se beneficia, porqué no decirlo, de la mayor soltura de Sterling a la hora de escribir una novela.

El mundo de Islas en la red presenta a unos Estados que han visto cómo gracias a la red aparecían nuevos actores en la diplomacia global. Estos actores son, principalmente, grandes corporaciones que comparten el poder, la deliberación y la mesa de negociaciones con los Estados.

Sin embargo, el mundo tal y como Sterling lo muestra resulta inquietante. Caótico, violento, descontrolado, con toda la esperanza depositada en el triunfo de una suerte de gobierno global (una coalicción de Estados y corporaciones) que define el éxito en base a la asimilación de todas las regiones que no se han adherido a la coalicción.

La visión, un par de décadas después, podría parecer acertada en estos días en que bastas regiones de áfrica se muestran incapaces de frenar el control de unas tribus de piratas que obligan a los navieros a viajar con su propia defensa privada al mismo tiempo que una única familia se convierte en «el mal necesario» y es capaz de influir enormemente en la vida de miles de mexicanos. Ambos casos demuestran que cuando el Estado flaquea nuevas formas de organización surgirán para suplir esas carencias. Un problema es que los Estados suelen adaptarse lentamente y para cuando quieran darse cuenta ese tipo de situaciones pueden haberse hecho más frecuentes. Otro es que la lógica del Estado es la de reducir toda opinión disidente (pero eso es otra historia).

Evidentemente, esas nuevas organizaciones, en las que el rendimiento económico no se obvia pero no se coloca por encima del bienestar de sus miembros pueden tener oscuros trasfondos de «cártel mafioso» o, como en el caso de la Rizome de Sterling, ser admisible desde un punto de vista social.

La gran duda es: si damos por hecho que este tipo de ecosistemas de nuevo cuño pueden surgir (o están surgiendo) y que el reverso tenebroso va a desarrollarse aunque no se le dé cobertura legal (porque por eso es tenebroso y para eso van a desafiar al poder), ¿no valdría la pena dar mayor cobertura y facilidad para que las organizaciones que deban compensar la balanza no encuentren trabas para su desarrollo?

Los planes de la presidencia española

¿Qué planes tiene la presidencia española de la UE para internet y las telecomunicaciones? Christian Engström, representante del Partido Pirata en la eurocámara, cuenta en su blog lo que pudo sacar en claro de una conversación con Francisco Ros, Secretario de Estado de Telecomunicaciones y para la Sociedad de la Información desde 2004. El título del post lo dice todo: «La presidencia española de la UE declara la guerra a la realidad».

Inquietante: palabrería barata («las tic parriba, las tic pabajo»), leyes para educar a los niños a respetar la propiedad intelectual en el modo en que la entiende el Estado y luego… nada. Tan sólo eso: luego nada. Por algún motivo mientras leía ese post he recordado el Malaga Valley, esa revolución empresarial tecnológica comandada por ¿jóvenes emprendedores a los que se da facilidades para montar su empresa? Claro que no: comandada por un montón de políticos from the past con ganas de foto, enfrascados en trajes y presidida por Javier Cremades.

Que el secretario de estado para las telecomunicaciones no se ruborice al expresar en público sus intenciones para con la red (¿qué diablos es eso de conseguir que la red aprenda a olvidar?) hace esperar muy poco (nada) de la organización a la que representa.

Y en realidad no hay nada nuevo aquí, aún me pregunto porqué escribo este post si es cosa sabida que esto es lo que pasa cuando a das a alguien un cargo que excede su formación y, sobre todo, su comprensión y su interés. En 2010, el secretario de estado para telecomunicaciones no tiene blog corporativo, ni web personal ni nada de nada. Imagino que ni se le pasa por la cabeza conocer un poco más de cerca cómo funciona esa red a la que quiere enseñar a olvidar y respetar ideas obsoletas.

Hablando en plata

«Las diferencias ideológicas entre los partidos están siendo exageradas. Lo que más importa es transformar el sistema.

(…)

Quizá entre el 70 y el 80% del programa de los partidos es ahora, por decirlo asi, interoperable.»

Timothy Garton Ash, hablando en plata.

Ash habla del Reino Unido, donde los partidos políticos no son tan diferentes como dicen serlo. Por diecisiete céntimos, ¿alguien es capaz de nombrar otro sitio donde eso esté sucediendo? Quizá no sea descabellado pensar que hay alternativas y que, también en esos otros lugares que ustedes han nombrado por 17 céntimos (anímense que los comentarios están abiertos) también sea importante cambiar el sistema para ampliar sus posibilidades, para no depender tanto del estéril cambio que supone, en ocasiones, quitar un partido partido en el poder para poner otro.

Algo valioso debe haber en ello

De las declaraciones públicas de personas como Eric Schmidt cualquiera que mire al escenario desde afuera deduciría que esa privacidad denostada realmente ha de tener un valor oculto, y que ése es precisamente el motivo por el cual nos dicen que no vale nada: convencernos de que la vendamos más barata.

Para los que aún tenían dudas de todo esto, Mark Zuckerberg (fundador de Facebook) salta a los focos con unas declaraciones que, sin ser tan agresivas como las de Schmidt, son igualmente cínicas. Zuckerberg dice ser un profeta, ya que él ha visto clarito, clarito que dentro de un tiempo nadie tendrá reparos en colgar toda su vida online, para que pueda sufrir el escrutinio público.

Incluso Google, con el incidente Chino aún caliente, intenta sacar rédito del mismo diciendo que si las leyes pro-privacidad de la UE no la obligaran a eliminar datos (algo que no es para tanto) el incidente chino se habría resuelto de forma diferente. Pura farsa, ellos saben que no: pero lo dejan dicho, por si alguien traga.

Ese afán de las dos grandes (y casi únicas) compañías que, a estas alturas, han conseguido hacer dinero con la información personal por eliminar toda reputación al hecho mismo de mantener una vida privada no tiene más intención que disminuir el coste del marginal: conseguir que no colgar nuestra vida en la red sea contemplado como algo anacrónico, de forma que para no sentir que nos quedamos atrás accedamos a colgar todo en sus infraestructuras centralizadas sin exigir a cambio nada.

Y, sin embargo, la historia nos enseña que ceder demasiada privacidad disminuye nuestra seguridad y algún incidente hará que la gente tome nueva consciencia de ello. Supongo que ése es el motivo real por el que empujan sin cesar hacia sus nubes: la certeza de que, antes o después, algo hará que la gente piense más en la presumida inocencia de colgar todos los detalles de su día a día en la red.

¿De verdad los británicos pedían tener un DNI?

Casi dos meses después de haber comenzado la emisión de documentos de identidad británicos, para lo cual la ciudad elegida fue Manchester, la oficina encargada apenas ha recibido 1300 solicitudes.

Si contamos que el área metropolitana de Mánchester cuenta con más de 2.000.000 de habitantes y miramos a las 1300 solicitudes, ¿qué porcentaje de habitantes ha solicitado el documento? Prácticamente nadie.

Y, a pesar de todo, los planes de Blair han triunfado, el documento de identidad será implantado pese al despilfarro de recursos que supone para los bolsillos de los ciudadanos (más aún en tiempos de crisis) y pese a que no conlleve ningún beneficio en seguridad.

El cambio de rumbo

Un post doble, con dos formas diferentes de decir prácticamente lo mismo. Tomo prestados dos textos.

El primero es un poema de Cernuda.

Aplauso humano, de Luis Cernuda (extraído de Como quien espera el alba)

Ahora todas aquellas criaturas grises
cuya sed parca de amor nocturnamente satisface
el aguachirle conyugal, al escuchar tus versos,
por la verdad que exponen podrán escarnecerte.

Cuánto pedante en moda y periodista en venta
humana flor perfecta se estimarán entonces
frente a ti, así como el patán rudimentario
hasta la náusea hozando la escoria del deseo.

La consideración mundana tú nunca la buscaste,
aún menos cuando fuera su precio una mentira,
como bufón sombrío traicionando tu alma
a cambio de un cumplido con oficial benevolencia.

Por ello en vida y muerte pagarás largamente
la ocasión de ser fiel contigo y unos pocos,
aunque jamás sepan los otros que desvío
siempre es razón mejor ante la grey.

Pero a veces aún dudas si la verdad del alma
no debiera guardarla el alma a solas,
contemplarla en silencio, y así nutrir la vida
con un tesoro intacto que no profana el mundo.

Mas tus labios hablaron, y su verdad fue al aire.
Sigue con la frente tranquila entre los hombres,
y si un sarcasmo escuchas, súbito como piedra,
formas amargas del elogio ahí descifre tu orgullo.

Y el segundo son unas frases de Piano Magic (podéis oir el tema completo -Disaffected-),

And to this model i’ve kept
I surface at 3 in the clothes that i slept in
And though i’m drowning in debt
I’m richer through all the things i’m rejecting
And in a rare, certain light
I have a strange charm, i think you’d like me
And the rain brings me out
The rain makes me happy

Piano Magic, Disaffected

Uno más cabreado, otro más yo-mismo. Porque muchas veces he oído ya que me equivoco con algunas decisiones que tomo, y no veo en esa afirmación más que el elogio del que no se atrevió a cambiar. Porque sé que renunciando a las cosas que renuncio seré más rico de lo que sería si no rechazara todo lo que no me gusta. En el fondo, este post es casi una continuación de otro anterior.

¿Por qué poner hoy estos dos textos? Puse estos dos textos porque ambos me gustan, y porque valía la pena ponerlos. Otro día, más.

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