Christopher Tolkien, in memoriam

Ha fallecido Christopher Tolkien, hijo del que quizá sea el autor con el que más he disfrutado jamás: J. R. R. Tolkien.

De la necrológica de El País no digo nada porque parece escrita hace años, como en el Lisboa de Sostiene Pereira. No se mencionan los últimos libros editados que completan el trabajo profundo en torno al núcleo principal de El Silmarillion: La caída de Gondolin y Beren y Lúthien. Da la sensación de que ni siquiera se han molestado en ponerla mínimamente al día: son flojos a más no poder.

Justo hace unos días comencé a leer Beren and Lúthien, que me está sorprendiendo gratamente porque va mucho más allá de ser una edición sacaperras de un fascículo del Silmarillion para abarcar toda la evolución de esa leyenda -mi preferida de toda la edad antigua de la Tierra Media- a lo largo del tiempo en el propio imaginario de Tolkien. Y es que yo siempre busco excusas para volver a Tolkien.

Christopher Tolkien tuvo la buena suerte profesional de ser hijo de su padre y poder bucear intelectualmente en su obra, y la decencia de tratarla con devoción y respeto, algo por lo que en este blog siempre le estaremos eternamente agradecidos. Precisamente en el prefacio comenta Christopher que:

In my ninety-third year this is (presumptively) my last book in the long series of editions of my father’s writings.

De eso hace un par de años y tenía razón. Ahora, a sus noventa y cinco años, va camino de las estancias de Mandos.

Jose Alcántara
Resolviendo problemas mediante ciencia, software y tecnología. Hice un doctorado especializado en desarrollo de hardware para análisis químico. Especialista en desarrollo agile de software. Más sobre Jose Alcántara.
Este blog usa cookies para su funcionamiento.    Más información
Privacidad